Los gobernadores de Santa Fe y Entre Ríos están en el grupo de los considerados dialoguistas, aunque con reparos sobre la discrecionalidad a la hora de repartir recursos por parte de Nación.
El tratamiento de la Ley Ómnibus en la Cámara de Diputados desató al menos dos escenarios por los que pasó la discusión de la norma: el intercambio entre legisladores en el recinto y las reuniones del Gobierno nacional con gobernadores, quienes hicieron de nexo para alcanzar la votación en general.
No obstante, el acuerdo para la gobernabilidad, apoyado en las intenciones de reordenar la economía y el Estado, está en constante reedición. El Gobierno nacional tendrá ayuda de los mandatarios para avanzar en cuestiones macro pero encontrará resistencia si se tocan los intereses de las provincias.
Tal es el caso de Maximiliano Pullaro, gobernador de Santa Fe, quien fue muy duro en relación a las modificaciones que se planteaban en el texto original de la Ley Ómnibus en materia fiscal, con mayor presión impositiva para el sector productivo y nuevos palos en la rueda para el desarrollo industrial.
«Me duele que un gobierno en el cual yo tenía expectativas de que iba a centrarse en los gastos superfluos para corregir el déficit fiscal; y que se iba a ocupar de la desigualdad en el reparto de los recursos y subsidios en tarifas, por ejemplo, quiera gravar a la industria que genera trabajo en mi provincia. Si ustedes analizan, esos dos o tres puntos de déficit de la economía nacional están concentrados en el AMBA», sostuvo Pullaro.
“¿Por qué se quiere corregir ese déficit con la producción; por qué pretenden gravar a la industria que genera trabajo en nuestra provincia?”, cuestionó el mandatario santafesino. “Hay industrias que pasarían de 0 al 15 % de retenciones; las sacan del mercado cuando estamos exportando y generando trabajo. Esto es no comprender la realidad, el ADN de Santa Fe y del interior productivo”, aseguró.
“Esto es lo que quiero que en Buenos Aires se entienda. Y si tengo que quedar solo en esa discusión, me voy a quedar solo. Pero no nos vamos a entregar, porque siempre vamos a defender a la producción que, en definitiva, es defender una Argentina distinta, la Argentina en la cual yo creo”, concluyó Pullaro.
Por su parte, Rogelio Frigerio de Entre Ríos fue una pata importante para acercar posiciones entre Nación y las provincias. Tras consolidarse algunas modificaciones en el texto, colaboró para que los cuatro diputados de su espacio acompañaran la votación en general del proyecto.
«Vamos a apoyar todo lo que tengamos que apoyar, pero también vamos a ser implacables en la defensa de los intereses de nuestra provincia», afirmó el gobernador, quien remarcó que los mandatarios sugirieron alternativas a lo que planteaba la ley en diferentes aspectos.
«Estamos atentos y trabajando todos los días con los bloques de diputados y senadores por Entre Ríos en torno a los proyectos de ley que ha enviado el gobierno nacional, apoyando lo que sostenemos que hay que apoyar, sobre todo la necesidad de llegar al equilibrio de las cuentas públicas; un esfuerzo que se está replicando en la provincia», sostuvo.