La planta de Insuga en Puerto Tirol, Chaco, fue formalmente inaugurada. Se trata de una importantísima inversión de la firma santafesina con sede en Recreo, que no para su proyecto de expansión nacional e internacional.
«Hoy se pone en marcha la planta. Arrancamos con la producción de Manada y Seguidor, que son nuestras dos líneas que se estaban haciendo en Santa Fe, para ser producidas y vendidas aquí. También la grasa Su Chaco, que por ahora estamos en 100 toneladas pero con tendencia a crecer. Es un producto netamente chaqueño, comercializado desde aquí», sostuvo Fabián Ardeti, presidente de Insuga.
En ese marco, Ardeti destacó el trabajo de todos los actores que intervienen para que los productos de Insuga tengan una gran aceptación en el mercado local e internacional. «La tarea en equipo es lo que manda todo. El equipo se logra con capacitación, teniendo en cuenta desde el primer eslabón hasta el último, la cadena de producción, el cliente y el ambiente de trabajo que hace que esta empresa pueda seguir trabajando como está lo está haciendo» muchas gracias por permitirnos compartir una vez más esta etapa de crecimiento insuga Chaco ya es una realidad», afirmó.
Por su parte, Lucas Santoro, coordinador de Operaciones de Grupo Insuga, explicó cuáles fueron los objetivos que se perseguían al momento de invertir en la ciudad chaqueña. «Estamos materializando una idea, un sueño que teníamos, que era buscar valor agregado a los dos productos principales que tenemos, sumándole valor tanto a Insuga como a la provincia», afirmó.
Y agregó: «Le estamos dando valor a la provincia, empleo chaqueño, profesionales chaqueños y estamos muy contentos de poder hacerlo acá; comercialmente nos pareció bien venir a esta provincia, que nos dio mucho».
En cuanto al proceso productivo, Santoro comentó que «más allá del proceso de cocción», también se aumentó «la digestibilidad de las proteínas o la parte de la formulación vegetal». En ese sentido, explicó las cualidades de las dos marcas que se fabrican: Manda y Seguidor.
«Hoy ambos productos están categorizados en segmentos Mainstream y Económico. Estamos ahora desarrollando ya un aumento de proteína para cada uno de ellos y los kilates, que son de 15 kilos. Pero, hoy estamos proyectando aumentar toda la cartera de productos, que es la gran posibilidad que tenemos de elaborar nuestros productos acá», indicó.
Jorge Capitanich: «Lo que ha hecho Insuga en Chaco es extraordinario»
El gobernador de Chacho estuvo presente en la planta de Insuga en Puerto Tirol. El mandatario estuvo cerca de la empresa durante los 10 años de inversión que suponen en la actualidad una fuerte de mano de obra genuina, que aporta valor al sector productivo de la provincia.
«Esto es un emprendimiento extraordinario que arrancó hace muchos años como un sueño en el año 2009, pero se fueron concretando muchos hitos en forma progresiva y la verdad es que acá ya hemos observado más de 310 millones de pesos de inversión, pero con un plan en proyección de 800 millones», destacó Capitanich.
En ese sentido, dijo que ya se logró superar «de los primeros 1.300 m2 a 3.000 m2, ahora con una perspectiva de 3.800 m2 pero con una base exportadora bien consolidada, con cerca de 5 millones en proyección». «Todo gracias a su grasa comestible Su Chaco, que es de muy buena calidad para el abastecimiento del mercado doméstico y con perspectivas para mercado internacional en forma próxima, de la misma manera que lo que significan Seguidor y Manada, que son dos muy buenos esquemas de provisión de alimento balanceado».
«No cabe la menor duda de que una alianza estratégica entre el Estado, los empresarios y los trabajadores es lo que solidifica un pacto social para el crecimiento, el desarrollo y la expansión del empleo privado formal de buena calidad», concluyó.
Capacitación constante, uno de los ejes de trabajo de Insuga
En la jornada de inauguración de la nueva planta, Fernando Luchetti y Jonatan Loidi fueron invitados a disertar para vendedores y clientes. El encuentor permitió un importante intercambio desde distintas perspectivas sobre la incorporación de nuevas herramientas y estrategias que pueden utilizarse la momento de cerrar un negocio exitoso.
«Esto que hace la empresa es fantástico porque le dio la posibilidad tanto a su gente como a sus clientes de poder conocer de primera mano algunas técnicas que los pueden favorecer y, en este mercado de alimento para mascotas que juega mucho la familia, es un mercado sumamente competitivo. Ya no se trata de despachar productos, no se trata de visitar al cliente y estar un ratito nada más, sino de competir en función de entender cómo es mi competencia, con qué productos», indicó Luchetti.
Por su parte, Loidi destacó: «Es muy fantástico, increíble y motivador ver empresas en Argentina que invierten, me parece que es emocionante también porque el contexto nunca invita a invertir; sin embargo, eligen hacerlo».
Un «alumno ejemplar» en programa de financiamiento
Adrián Atanasoff, vicepresidente de Fiduciaria del Norte, contó cómo fue el proceso de financiamiento e inversión de la empresa santafesina para instalar su nueva planta de producción en Puerto Tirol.
«La verdad es que para nosotros es un orgullo que Insuga esté en la provincia. Los hemos apoyado desde todas las etapas, desde sus primeras inversiones y ahora ya con la emisión de obligaciones negociables. Para nosotros ha sido como el alumno ejemplar, porque ha hecho todo el caminito. Primero con créditos que vienen desde fondos fiduciarios de la provincia para el desarrollo de la industria, luego con créditos bancarios para terminar con la emisión de obligaciones negociables, así que fue el alumno perfecto», sintetizó Atanasoff.
Sobre Insuga
La empresa se dedica a la transformación de desechos de frigoríficos en productos que se reintroducen en la cadena productiva, generando valor. Se trata de la principal compañía regional de transformación de materia prima cruda proveniente de la elaboración de despojos frescos de faena, procedentes de establecimientos habilitados.
Insuga produce diferentes tipos de derivados de los subproductos de la industria frigorífica. Por ejemplo, harinas de carne y hueso, materias primas para la elaboración de alimentos de consumo animal.
También fabrican sebo vacuno industrial, cuyo uso está principalmente orientado a la elaboración de productos con alto valor agregado como jabones de distintas calidades, grasas y margarinas refinadas, alimentos balanceados para mascotas, y otros.
Además, a través del exhaustivo tratamiento de los efluentes de sus plantas, contribuyen al desarrollo de la comunidad y al cuidado del medio ambiente de una manera ejemplar.